Al hablar de los orígenes de la casa de Formación San Lorenzo tenemos que remontarnos hacia una iniciativa que fue radicalmente importante para Diócesis de Valdivia, como lo fue la apertura del Departamento de Formación y de Teología a Distancia que en el año 1999 fue dirigido por el P. José Enrique Varas. Este departamento funcionaba en dependencias de la Casa Pastoral de Avda. Picarte. En ese momento la tarea se abocó a la Formación de Ministros; Candidatos al Diaconado y la Teología a Distancia, gracias a un convenio promovido y administrado en esa época con el Instituto Internacional de Teología a Distancia, Instituto asociado a la Universidad de Comillas (Madrid).
La continuidad natural de esta iniciativa (con el mismo director) fue la inauguración de un espacio independiente para desarrollar la acción formativa, y este espacio fue la Casa de Formación San Lorenzo, abierta a mediados del año 2001 con las mismas finalidades que el Departamento de Formación: formar ministros, especialmente ordenados en el diaconado, cuyo patrono es San Lorenzo. En este año se incorpora al quehacer de la Casa la Hna. Ana María Salinas (quien fue nuestra tercera directora de la Casa, en el año 2014, luego de la dirección del P. Tibaldo Zolezzi)
Con el paso del tiempo, el quehacer de la Casa de Formación fue abriéndose a otros ámbitos de formación, considerando también el aporte de la formación de los alejados, de los curiosos, de los estudiosos compulsivos, de tantos laicos de nuestras comunidades… que sin tener un cometido pastoral, buscan profundizar en su fe y se hacen fermento con su testimonio en medio de creyentes y no creyentes. En el año 2004 se suma al quehacer de la Casa la Comisión Diocesana de Catequesis, ampliando la tarea hacia la formación, en diversos ámbitos y niveles, de los catequistas. En este período se incorporan Sergio Rodríguez (en Catequesis) y Bastid (como encargada de la impecable mantención de la casa)
A la par que se iban consolidando programas formativos para laicos como adaptación de programas de otras diócesis, iban ocurriendo procesos de transformación natural, como fue el inicio del cierre del trabajo de la Teología a distancia, en el año 2005 (la última cohorte de egresados, fueron en el año 2007, de la diócesis vecina de Temuco). En el mismo período también perdimos a nuestra colaboradora Elvira, y en su reemplazo asume Claudia Delgado, desempeñando el cargo de Administradora y Secretaria hasta hoy. No tuvimos la misma suerte para que alguien tomase el testimonio que cargaba Marlen Wilde (fallecida hace poco), sumándose la Hna. Ana María, aún no directora, al Equipo de Catequesis. En este período el P. Tibaldo Zolezzi asume la dirección de la Casa San Lorenzo en reemplazo del P. José Enrique Varas.
En el 2007 se dio un gran paso firmando un convenio con la Universidad Católica de Temuco y desde entonces se han implementado varios Diplomados con su licencia: en estudios teológicos (el primero inició el año 2006), bíblicos y de espiritualidad; también como postítulo la mención en Religión para profesores. El convenio fue bueno, cercano y fructífero, tanto que desde la UCT solicitaron al P. Tibaldo asumir la Decanatura de la Facultad de Ciencias Religiosas y Filosofía. Eso fue en el año 2014, en que la Hna. Ana María asume (luego de varios cargos) la Dirección. Cargo que desempeñó hasta el año 2017, en que se le solicitó asumir la Pastoral Social (ahora fuera del espacio de la Casa San Lorenzo). La hermana, en sus 16 años de colaboración contribuyó a consolidar una propuesta y una oferta consolidada al servicio de la Formación de la Diócesis. En su reemplazo Mons. Ignacio Ducasse nombra director de la Casa al P. Gonzalo Espina Peruyero (nuestro cuarto director), sin embargo a los pocos meses, y ante el traslado de Mons. Ignacio hacia Antofagasta, el P. Gonzalo es nombrado Administrador Apostólico, manteniéndose como Director en forma paralela.
Este año 2019, como una forma de ir liberando, diversificando y delegando funciones, el P. Gonzalo nombra a nuestro quinto Director, el prof. Javier Vega Ramírez, para que pueda continuar y consolidar el esfuerzo de todo estos 17 años de trabajo y esfuerzo continuo. Así, junto con Bastid, Sergio y Claudia contamos con un Equipo de cuatro personas que debemos tomar el testimonio de la fe y la formación y mantenerlo en carrera.
(Reseña preparada con el material aportado por la Hna. Ana María Salinas durante su intervención en el “Miércoles de Encuentro” del 27 de septiembre de 2017)